Como ya sabrás, Santander es una parada obligatoria si vas a visitar Cantabria.
Al ser la capital cántabra, te maravillará sus rincones mágicos, su bahía y sus monumentos. Por no hablar de las vistas al mar… ¡Inigualables!
Hoy en el Pájaro Amarillo, si apenas tienes tiempo para disfrutar de esta ciudad, te vamos a dar los esenciales para saber qué ver en Santander en 3 días.
¡Así que prepárate que comenzamos!
Día 1: Una visita por los lugares más famosos de Santander
Primera parada: las playas
Con tu llegada a Santander, te recomendamos un primer vistazo a nuestras playas, famosas por ser unas de las mejores de España.
Con su arena blanca y fina son perfectas para darte un paseo por ellas y por qué no, tomarte una cerveza bien fresquita.
Comenzamos por la más famosa: El Sardinero no te dejará indiferente.
Es perfecta para una primera toma de contacto, respirar y disfrutar del olor a mar tan único, y si el tiempo te deja, un buen chapuzón.
O si lo prefieres, su extenso paseo marítimo te permitirá disfrutar de un largo y agradable paseo.
Además, si tu visita es para aprender a surfear, aquí tienes muy buenas escuelas que conseguirán sacar a tu surfer interior.

También te recomendamos, visitar la playa de El Camello. ¿Sabes que su nombre viene por una roca muy singular?
Te retamos a que vayas y la descubras por ti mismo.
Otra parada obligatoria, es la playa de Mataleñas.
Una impresionante playa bajo el abrigo de dos increíbles acantilados. Aunque la bajada a la playa pueda resultar algo complicada, merece mucho la pena.
Pero al estar tan cerquita de Santander, suele tener bastantes visitantes.
Otras playas cercanas a Santander
Ahora, si lo que buscas es algo distinto, y no tan abarrotado de gente, estás de suerte.
Estas son las playas paradisíacas cercanas a Santander:
Valdearenas-Liencres

Nuestra favorita. Está situada en El Parque Natural de las Dunas de Liencres.
Aquí podrás disfrutar de uno de los mejores atardeceres de Cantabria, o al menos eso es lo que se dice. ¡Pero nosotros lo corroboramos!
Es perfecta para hacer surf, o caminar por sus 3 kilómetros de longitud a través de sus suaves arenas.
Nuestra querida playa de Oyambre
Como ya sabrás, nuestra cerveza tiene historia. Y esta comenzó en esta querida playa.
Y por eso, aunque no esté cerca de Santander, si quieres puedes pasarte a dar una vuelta por allí. Os encantará.
También te recomendamos las playas de:
- Los Covachos, a tan solo 10 kilómetros de Santander. Está permitido hacer nudismo en ella.
- La Arnia, una playa de lo más salvaje y rocosa.
- La playa de Somocuevas, es nudista también, pero no tendrás problema si vas con bañador.
- El Puntal, justo en frente de Santander. Tranquila y con unas vistas geniales a la ciudad de Santander.
Una vez tengas claro qué playa visitar, podemos seguir con nuestro día en Santander. Eso sí, te recomendamos un atardecer en ellas.
Next stop: La Península de la Magdalena
Este lugar es un sitio emblemático de la ciudad, lo que le hace ser una parada más que obligatoria para tu visita por Santander.
Puedes acceder bien andando o en bus, o en coche, ya que hay parking. Aquí puedes ver su horario de visita.
Te encantará su estilo neoclásico. Y si puedes acceder, puedes conocer los detalles de la antigua residencia veraniega del rey Alfonso XIII y su esposa, María Eugenia.
Pero este palacio, ahora sede de la UIPM, también tiene unos alrededores dignos de admirar.
Podrás pasear por un pequeño bosque de hayas, caminar por sus playas que tiene a su derecha (La de los Bikinis y la de la Magdalena) o disfrutar de sus increíbles vistas sentado en un tranquilo banco.
Incluso si vas con niños, allí podrás disfrutar de unos agradables animales en un minizoo.
¡Les encantará ver a los leones marinos y a las focas!
Otra parada: El Faro de Cabo Mayor

Solo te diré una cosa. Sus vistas son impresionantes.
Y merece mucho la pena subir hasta aquí. Actualmente, los edificios adosados al Faro cuenta a veces con exposiciones marinas o incluso como museo.
Por no decir de que una vez este allí, las rabas del bar que hay en su base no te defraudarán.
Y es que no se puede pedir más: unas vistas impresionantes y comida más que deliciosa.
Pero sigamos con nuestra visita.
Llega la hora de la comida
Te recomendamos que si vas paseando por el Paseo Marítimo, sus bares y restaurantes son de lo mejorcito.
Aquí puedes ver los mejores sitios donde comer en Santander.
O si prefieres unos buenos pinchos para comer, te recomendamos sin duda Casa Lita. Sitio de referencia entre los santanderinos.
O Cañadio, un bar que recibe el nombre de la plaza donde se ubica, ya que tiene unos pinchos muy económicos y deliciosos.
Además, si te acercas un miércoles debes de saber que los pinchos valen ¡tan solo 1 euro!
Una de las zonas que más nos gusta a nosotros comer es en el Barrio Pesquero. No hay pescado y marisco más rico que ese.
El Museo marítimo del Cantábrico
Este museo está bastante cerca de la Península de la Magdalena.
En el verás instrumentos de navegación antiguos, cartas náuticas y objetos procedentes de la Escuela Náutica de Santander.
Hasta grabados y pinturas de carácter marinos del Museo Municipal de Bellas Artes.
Otros edificios que ver en Santander
Para un primer día tal vez sea algo intenso, pero mientras paseas por la ciudad, siempre puedes hacer unas paradas rápidas por sitios bastante interesantes.
El estadio el Sardinero
Si eres futbolero, no puedes perderte las vistas de este estadio y conocer el templo de los seguidores del Racing de Santander.
Está muy cerca de la playa, así que solo tendrás que andar un poco hacia el interior de la ciudad.
El Gran Casino Sardinero

Este edificio es increíble. Desde 1916 se ha convertido en toda una parada obligatoria de la ciudad.
Y si entras, fíjate en sus vidrieras y en sus espectaculares escaleras. Entenderás porque a la gente le gusta tanto.
Y si ya te animas a jugar, ¡adelante!
Día 2: Visita por los monumentos y rincones mágicos de Santander
Este día lo hemos querido reservar para conocer los monumentos más importantes (y bonitos) de la ciudad. ¿Preparado?
La catedral de Nuestra de la Asunción
Esta catedral de estilo gótico, fue construida entre los siglos XII y XV. Primero sirvió como abadía, pero poco a poco con las ampliaciones, se ha convertido en lo que es hoy.
Se dañó mucho durante el incendio de Santander de 1941, pero fue totalmente reconstruida.
Si quieres visitarla, podrás hacerlo de martes a domingo. Si tienes alguna duda, aquí puedes saber más sobre la Catedral.
Plaza de Pedro Velarde

Muy cerca de la catedral, está esta famosa plaza construida tras el incendio.
También se la conoce como la plaza Portificada, por sus numerosos pórticos.
Los domingos es uno de los puntos de encuentro, ya que allí tiene lugar un mercadillo, donde podrás encontrar de todo.
Además de acoge muchas actividades deportivas y culturales.
Un paseo por el Centro Botín

Este edificio moderno tiene unos de los mejores miradores. Puede que te impresione que tenga el suelo de cristal, pero tranquilo, son muy seguros.
Y te encantará sentirte como flotando en el agua.
Aparte de esto, el Centro Botín es uno de los centros de arte más importantes de la ciudad.
Monumento a los Raqueros

Es una de las paradas más que obligatorias si vas por el paseo Marítimo.
Estas estatuas homenajean a los niños marginados y pobres que frecuentaban la zona del puerto para ganarse la vida.
Te fijarás que uno de ellos parece que se va a tirar al mar, y es que además de realizar pequeños robos, también se tiraban al mar en busca de pequeñas monedas.
Día 3: Rincones con encanto de Santander
Este tercer día lo vamos a destinar para que conozcas rincones poco conocidos de Santander. Pero que tienen una magia especial.
El cementerio protestante de Santander

Si eres amante de la historia, este sitio llamará toda tu atención.
Se trata de uno de los pocos cementerios protestantes que hay en España.
Este se creó torno a 1864, a las afueras de la ciudad, en Cazoña. Aunque esté cerrado, por sus verjas puedes ver sus tumbas.
Y, a pesar de lo que parece… Hay casi 128 registros de enterramientos allí.
Increíble, ¿verdad?
Subir el funicular de Río de la Pila
Nada como terminar tu escapada a Santander en 3 días como conocerla desde otro punto de vista.
Este funicular se inauguró en 2008, y es totalmente gratuito.
3 paradas te separan de unas vistas excepcionales de esta bella ciudad. Te lo aseguro.
Por supuesto, cualquiera de estos días no puedes perderte disfrutar de los platos típicos que otorga esta ciudad.
Las deliciosas rabas, los mariscos del cantábrico, un cocido montañés, unas anchoas de Santoña…
Y si eres de los que no les amarga un buen dulce, los sobaos pasiegos y la quesada…¡¡Son Deliciosos!!
Por supuesto, si a tu vuelta tienes sed, siempre puedes parar a tomar una cerveza bien fresquita… 😉
Y a ti, ¿qué parada te parece obligatoria visitar para conocer el encanto de Santander en 3 días?